Tres collares de Nueva Orleáns de distinto color. Un cuaderno pesado con ideas ligeras. Un libro que contiene el peso de muchos mundos. Cinco plumas azules y dos con tinta negra. Pañuelos desechables para seguir respirando. Bastantes recuerdos tuyos para seguir suspirando. Algunos boletos de viajes pasados. Suficientes monedas por si se presenta la oportunidad de llamarte. Un cepillo de dientes y un tubo con dentífrico de menta. Una goma de mascar para desatascar mis ideas. Crayones de cinco colores para iluminar mis sueños. Muchos papeles que no están a la venta. Un sobre dispuesto para guardar la voluntad tardía y quizás meterla en un buzón; un CD con excelentes melodías. Firmas al final de cada escrito. Es lo que llevo siempre en mi mochila.
Hermosos fracasos. Escritos que brotaron de mi mente, sin detenerse, durante muchos años.
3 comentarios:
No esta mal lo que contiene tu mochila.
Practico, para que más.
No hay como cargar liviano, Pirata!
Eso aligera el caminar.
Vengo a agradecerte tu comentario en mi blog y a darte la bienvenida a mis puertos. Atraca alli todas las veces que quieras.
Volvere para leerte con mas tiempo,
ahora fue mas un pantallazo, mientras tando te doy un abrazo
Gracias por pasarte por mi blog de Au Pair, lo que he visto aqui me gusta, asi que volvere. Escribes de p.m.
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